Carrera de Derechos Humanos

A fines del año 2007, en uno de nuestros habituales encuentros con las compañeras de de Familiares de Detenidos y desaparecidos por Razones políticas, en los que discutíamos sobre tareas realizadas en conjunto e intentábamos imaginar otras, surgió de su parte la propuesta sobre la posibilidad de armar una Carrera de Derechos Humanos que fuese parte de la Universidad de Bueno Aires y más específicamente de nuestra facultad de Ciencias Sociales.
En ese momento Mabel Gutierrez desplegó sus argumentos con seguridad y firmeza: la tétrica singularidad del Terrorismo de Estado y la fortaleza del proceso de lucha que lo enfrentó, han generado reflexiones contemporáneas transmisibles sobre distintas cuestiones que debían ser incluidas en una noción amplia y no cristalizada de Derechos Humanos. La universidad pública tenía una responsabilidad fundamental y conocimiento acumulado para concretar formalmente esa posibilidad: La solicitud se hizo entonces a la Carrera de Sociología, por la cercanía producto de las acciones conjuntas y porque además estaba en una facultad ligada en su conjunto a la lucha por los derechos humanos. Esa solicitud fue para nosotros un compromiso fuerte en relación, por los menos, a dos cuestiones básicas: en principio, la derivada del respeto de cualquier ciudadano sensible y militante además de la universidad pública, a las luchas de los organismos de DDHH; pero también, a decir verdad, porque en nuestro caso, ese respeto general se había transformado en afecto concreto a partir del trato cotidiano.
La relación con esta dirección de la Carrera de Sociología se había construido, desde ya, en ese respeto y admiración por quienes con valentía habían desafiado al terrorismo de estado no solo reclamando por los presos y desaparecidos, sino además –en este caso particular-, reivindicándolos desde el primer momento como luchadores políticos. No es en vano volver a mencionar que los potentes elementos de dignidad que revivificaron a nuestra sociedad, a la que la dictadura le había dejado agujeros estructurales y simbólicos significativos, surgieron de las luchas obcecadas de estos movimientos. Pero nuestra relación con los queridos amigos de Familiares tiene aun aspectos más profundos debido a que ellos supieron estar en momentos difíciles junto a distintos compañeros de la Carrera de Sociología detenidos en el período democrático. Esta situación, obviamente no les presentaba los riesgos que ellos habían afrontado en dictadura, pero, sin embargo, se encontraban ante verdaderos muros culturales que ellos supieron derrumbar ejerciendo una solidaridad sin ambigüedades.
En esos primeros momentos en que fue planteada la inquietud recorrimos uno de los edificios de la ex ESMA que corresponden a Familiares y comenzamos a pensar en las posibilidades concretas de construcción del proyecto. Las compañeras imaginaban dónde estarían las aulas, proponían que existiese un gran salón de actos, sugerían que cuanto antes algunas clases de la facultad pudieran darse en el lugar para ir poblando ese espacio, que fuera sombrío, de los gestos vitales de la cultura estudiantil.
Por supuesto quedaba un camino por recorrer. El punto de partida era la energía, la voluntad inquebrantable de esas militantes que solicitaban de nosotros la construcción de una verdadera plataforma conceptual que sería fundamental en la concreción definitiva de la propuesta. Esa plataforma debía ser un proyecto sustentable, que tuviese relevancia cultural académica y política. Sabíamos que en las autoridades y en cada una de las diferentes carreras que forman la Facultad de Ciencias Sociales contaríamos con compañeros dispuestos a poner con entusiasmo su saber específico a disposición de esta experiencia. Y efectivamente así ocurrió.
Tuvimos una entrevista junto a las compañeras de familiares, con nuestro decano Federico Schuster, quien recibió con entusiasmo la propuesta, y puso a disposición de esta iniciativa el capital académico de la Facultad de Ciencias Sociales y la decidida voluntad política de su gestión. Inmediatamente a esta entrevista, el vicedecano Damián Loretti reafirmó el compromiso haciendo un recorrido junto a nosotros y a las compañeras de Familiares, por las instalaciones ubicadas en la ex ESMA. A partir de este momento se conformó una comisión con profesores de las carreras de Ciencias de la Comunicación, de Ciencias Políticas; de Relaciones del trabajo; de Trabajo Social y de Sociología. Esta comisión, que se transformó en un espacio significativo de reflexión académico-político, para la Facultad de Ciencias Sociales, estuvo integrada al comienzo por Luis Alen, María Isabel Bertolotto, Gabriela Cauduro, Daniel Cieza, Adriana Clemente, Emilio Crenzel, Alcira Daroqui, Eduardo Luis Duhalde, Felicitas Elías, Carlos Eroles, Patricia Funes, María Rosa Gómez, Inés Izaguirre, Eduardo Jozami, Alejandro Kaufman, Marcelo Langieri, Damián Loretti, Juan Carlos Marín, Carolina Mera, Jorge Mayer, Edna Muleras, Enrique Oteiza, Roberto Pompa, María Sondereguer, Mecky Vega, Patricia Vara, y Viviana Vega. Luego de un intenso año de trabajo en el que este grupo amplio de profesores e investigadores de nuestra facultad, a sabiendas de que estaban ante una tarea trascendente, debatieron con preocupación y apasionamiento, una comisión de tres compañeros redactó la versión final de este proyecto.
Se realizaba así una parte fundamental del sueño de estos luchadores incansables que conforman Familiares de detenidos y desaparecidos por razones políticas y muy particularmente de una de sus integrantes recientemente fallecida, Mabel Gutierrez, verdadera creadora intelectual e impulsora tenaz de la experiencia. En el trabajo minucioso y responsable de cada uno de nuestros profesores concretado en este proyecto, se expresa, de manera clara el compromiso de la Facultad de Ciencias Sociales con la sociedad argentina, y a su vez, también, la materialización del deseo de esta luchadora, y por lo tanto, la forma activa y vital de una herencia, que es sin dudas el mejor homenaje a su inclaudicable trayectoria.

Lucas Rubinich
Director de la Carrera de Sociología